El Mago Toni es un joven madrileño que empezó en el mundo de la magia con apenas 10 años, pero fue al cumplir 17 cuando un gran mago le recomendó un libro que le absorbió completamente e hizo que su vida cambiase de manera increíble. Desde que leyó aquel primer libro de Cartomagia, no ha parado de formarse y aprender de manera completamente autodidacta a base de libros, vídeos y muchas horas de ensayo delante del espejo. De siempre le había gustado la magia, y no dudaba, siempre que podía, en demostrar sus recién adquiridas habilidades con cartas y monedas a familiares y amigos, pero de ahí a dar el paso y actuar ante todo tipo de público...era una gran distancia. Cuando cumplió los 18 años decidió invertir algunos ahorros en material de magia y a interesarse por estudiar y profundizar más en la Magia Infantil. Con esa edad presentó su primer espectáculo de magia para niños.

A partir de ese momento fue cuando verdaderamente descubrió que la magia era algo más que un simple hobbie, y que ver las caras de asombro y oír las risas del público era una sensación indescriptible. Desde entonces empezó a tomárselo más en serio: compró más libros, se sacó los Títulos de Monitor y Coordinador de Tiempo Libre, hizo cursos de Globoflexia, Voluntariado, Animación… Todo ello siempre compaginado con sus estudios de Psicología, carrera que ha terminado y a la cual se dedica actualmente. El salto cualitativo lo dio al completar en El Escorial los tres años de estudios universitarios de Magia e Ilusionismo, único grado de estas características en Europa. Con respecto a los idiomas, logró los títulos del First y el Advanced Certificate in English, lo que le permite realizar talleres y espectáculos de magia completamente en inglés.

A día de hoy, Toni lleva más de 15 años llevando su magia a niños y mayores en colegios, centros culturales, hospitales, ludotecas, empresas, restaurantes, locales y domicilios, realizando multitud de actuaciones por todo Madrid, y ahora también en Lleida. Ahora la magia forma parte de su vida, la cual, junto con su habilidad y sentido del humor, su psicología y su dedicación al trabajo pedagógico con niños, hace que sus espectáculos estén llenos de risas, interacción e ilusión, sorprendiendo tanto a niños como a adultos. Y lo mejor de todo, es que se nota que disfruta haciéndolo.